Siguiendo camino hacia el Sur hicimos una parada de dos días en Guelmin y alrededores. Es un buen punto de inicio para conocer el Antiatlas, cordillera situada en paralelo y al Sur del Gran Atlas.
Camachuelo trompetero, los encontramos bebiendo en el único punto de agua que vimos en todo el día pudimos fotografiarlos a placer sentados en la orilla del agua.
Cientos de hectáreas de estepa antes de adentrarnos en el Antiatlas, los únicos árboles que se ven son Arganes, endémicos de Marruecos y del que se extrae un aceite con propiedades terapéuticas.
En las cercanías de Guelmin en una remota carretera dirección a Assa
se pueden ver unos cuantos oasis. Hasta que no ves el primero de ellos
no puedes imaginarte que en el mismísimo desierto puede haber ese
vergel.
Oasis de Taghjicht, en pleno desierto pedregoso.
Palmeral en un oasis cerca de Icht.
Sapo verde en un oasis.
Rana sahárica
Oasis de Timglub
Palmeral cerca de Tafraoute
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